Тренировочный вариант Яндекс.ЕГЭ по испанскому языку № 6 за 2016 год

A. La iniciativa y el esfuerzo son cualidades ligadas a una actitud positiva. En cuestión de carácter, las empresas demandan gente que no se desanime, con una personalidad fuerte y que sepa aguantar los fracasos.

B. Las empresas necesitan personas con capacidad de adaptación a las necesidades del entorno, que es muy cambiante en un corto período de tiempo, universitarios ágiles con capacidad para tener flexibilidad en el ámbito de trabajo y para relacionarse con distintos contextos profesionales. Para una empresa grande moderna, aceptar la movilidad funcional y geográfica es uno de los requisitos básicos a la hora de contratar a un recién licenciado.

C. Siempre que se habla de "buena presencia", en realidad (salvo en empleos muy específicos en los que se sube mucho el nivel) se está hablando de normalidad y, sobre todo, de forma de vestir correcta y clásica. La presencia física ha de transmitir a quien nos está entrevistando que estamos seguros de nosotros mismos y que sabemos estar, adaptarnos a las situaciones.

D. Aunque sea cuidando niños, poniendo copas o en una hamhurguesería, tener un trabajo, incluso si no tiene que ver con la carrera, da una idea de responsabilidad en la vida. Una empresa que ofrece un puesto de trabajo ve con buenos ojos que alguien haya realizado alguna actividad profesional mientras estudiaba. Tener cualquier tipo de trabajo aporta serenidad y conocimientos prácticos del mundo laboral.

E. Sigue siendo imprescindible el inglés. De hecho, la mayoría de las grandes empresas hacen la entrevista de selección en inglés. El proceso de selección de licenciados en una gran multinacional suele incluir una primera fase de pruebas psicotécnicas e inglés, y luego una segunda fase de dinámica de grupo. También se valora mucho el idioma de la casa matriz.

F. Enchufes aparte, haber pasado por una escuela de negocios prestigiosa, estar en la bolsa de trabajo de una institución de toda confianza o haber hecho un master reconocido ayuda mucho. En muchos centros de enseñanza superior se mantiene relación con antiguos alumnos que ahora, al cabo de varios años, están en puestos directivos en numerosas empresas. Los antiguos alumnos se dirigen a esos centros cuando necesitan contratar a alguien, con la idea de tener una preselección hecha. Confían en que les manden gente que pueda responderles.

G. ¡Ojo! Están mejor vistos por las empresas los deportistas que los intelectuales, así que tengamos esto en cuenta. El deporte aporta muchos valores. Por ejemplo, la capacidad de esfuerzo, el hábito del trabajo en equipo y la necesidad de aguantar cuando uno se siente frustrado por no obtener el éxito que quería. Todos estos valores se parecen a los que pide una empresa.

Ir de viaje siempre es una experiencia emocionante que esperamos con ilusión. Lo que no nos suele hacer tanta gracia es el “momento maleta”. Saber qué llevar y cómo guardarlo es todo un arte, pero una vez que se aprende (A) ________ . Antes de hacer la maleta haz una lista con todo lo que (B) ________, teniendo en cuenta qué temperatura hace y qué vas a hacer allí. Evita los temibles “por si acaso”. A menudo las maletas suelen llenarse de prendas que metemos para situaciones hipotéticas que (C) ________ . Dentro de zapatos o botas tienes un espacio rígido, donde puedes meter cosas que no quieres que (D) ________ (por ejemplo, un collar de cristales de Swarovski). Los zapatos deben ir en bolsas individuales y bien encajados para que (E) ________ . El cinturón enrollado ocupa más, así que colócalo estirado de manera que (F) ________.

¿Quién era el sereno y qué hacía? Pues, el sereno siempre trabajaba de noche. A eso de las once de la noche se cerraban los portales de los edificios de las ciudades españolas y salía a trabajar el sereno con su chuzo (palo armado con un pincho de hierro). Él vigilaba por la calle durante la noche. Iba vestido con una bata gris y tocado con una gorra. También llevaba las llaves de los portales de todos los edificios de la calle o de la manzana que él tenía asignada. No podía salir de ésta, a menos que existieran circunstancias de especial urgencia y habiéndose asegurado de antemano un sustituto. Durante su horario laboral no debía mantener conversaciones ni sentarse y, por supuesto, tenía que mantenerse siempre en estado de alerta.

Cuando un vecino regresaba a casa después de las once de la noche, daba palmadas al llegar al portal de su casa. Al oír las palmadas, el sereno daba unos golpes con su chuzo. Cuando el vecino los oía, sabía que el sereno iba a llegar dentro de unos momentos. Y así era. Casi en seguida el sereno aparecía de la oscuridad con su chuzo y el gran llavero en la mano. Como el sereno conocía a todos los vecinos, siempre les saludaba cuando volvían a casa. Mientras les abría el portal, les decía: “Buenas noches y gracias”. ¿Por qué les daba las gracias? Los vecinos siempre sacaban de su bolsillo una moneda de cinco pesetas y se la daban al sereno. Los serenos no gozaron nunca de garantía social ni contrato de trabajo. Vivían fundamentalmente de las propinas de los vecinos de su manzana.

Antiguamente el sereno hacía más que vigilar la calle y abrir los portales. Uno de sus cometidos consistía en cantar las horas a intervalos de quince minutos. Después de dar las horas él añadía el estado del tiempo: “¡Las doce y cuarto y sereno!” o “¡Las tres y media y lloviendo!” Algunos serenos especialmente comunicativos hacían referencia al fulgor de las estrellas o cualquier otra circunstancia que les pareciera apropiada. A veces, también eran los primeros en detectar un incendio y alertar al cuerpo de bomberos.

Hoy en día no hay más serenos. La gente tiene que llevar las llaves para abrir los portales de sus casas. Cuando había serenos los vecinos se quejaban un poco, porque creían que el sereno sabía demasiado de su vida. Hoy lamentan la desaparición de estos “ángeles nocturnos”. Dicen que sin su vigilancia hay más crímenes en las calles.

¿Quién era el sereno y qué hacía? Pues, el sereno siempre trabajaba de noche. A eso de las once de la noche se cerraban los portales de los edificios de las ciudades españolas y salía a trabajar el sereno con su chuzo (palo armado con un pincho de hierro). Él vigilaba por la calle durante la noche. Iba vestido con una bata gris y tocado con una gorra. También llevaba las llaves de los portales de todos los edificios de la calle o de la manzana que él tenía asignada. No podía salir de ésta, a menos que existieran circunstancias de especial urgencia y habiéndose asegurado de antemano un sustituto. Durante su horario laboral no debía mantener conversaciones ni sentarse y, por supuesto, tenía que mantenerse siempre en estado de alerta.

Cuando un vecino regresaba a casa después de las once de la noche, daba palmadas al llegar al portal de su casa. Al oír las palmadas, el sereno daba unos golpes con su chuzo. Cuando el vecino los oía, sabía que el sereno iba a llegar dentro de unos momentos. Y así era. Casi en seguida el sereno aparecía de la oscuridad con su chuzo y el gran llavero en la mano. Como el sereno conocía a todos los vecinos, siempre les saludaba cuando volvían a casa. Mientras les abría el portal, les decía: “Buenas noches y gracias”. ¿Por qué les daba las gracias? Los vecinos siempre sacaban de su bolsillo una moneda de cinco pesetas y se la daban al sereno. Los serenos no gozaron nunca de garantía social ni contrato de trabajo. Vivían fundamentalmente de las propinas de los vecinos de su manzana.

Antiguamente el sereno hacía más que vigilar la calle y abrir los portales. Uno de sus cometidos consistía en cantar las horas a intervalos de quince minutos. Después de dar las horas él añadía el estado del tiempo: “¡Las doce y cuarto y sereno!” o “¡Las tres y media y lloviendo!” Algunos serenos especialmente comunicativos hacían referencia al fulgor de las estrellas o cualquier otra circunstancia que les pareciera apropiada. A veces, también eran los primeros en detectar un incendio y alertar al cuerpo de bomberos.

Hoy en día no hay más serenos. La gente tiene que llevar las llaves para abrir los portales de sus casas. Cuando había serenos los vecinos se quejaban un poco, porque creían que el sereno sabía demasiado de su vida. Hoy lamentan la desaparición de estos “ángeles nocturnos”. Dicen que sin su vigilancia hay más crímenes en las calles.

¿Quién era el sereno y qué hacía? Pues, el sereno siempre trabajaba de noche. A eso de las once de la noche se cerraban los portales de los edificios de las ciudades españolas y salía a trabajar el sereno con su chuzo (palo armado con un pincho de hierro). Él vigilaba por la calle durante la noche. Iba vestido con una bata gris y tocado con una gorra. También llevaba las llaves de los portales de todos los edificios de la calle o de la manzana que él tenía asignada. No podía salir de ésta, a menos que existieran circunstancias de especial urgencia y habiéndose asegurado de antemano un sustituto. Durante su horario laboral no debía mantener conversaciones ni sentarse y, por supuesto, tenía que mantenerse siempre en estado de alerta.

Cuando un vecino regresaba a casa después de las once de la noche, daba palmadas al llegar al portal de su casa. Al oír las palmadas, el sereno daba unos golpes con su chuzo. Cuando el vecino los oía, sabía que el sereno iba a llegar dentro de unos momentos. Y así era. Casi en seguida el sereno aparecía de la oscuridad con su chuzo y el gran llavero en la mano. Como el sereno conocía a todos los vecinos, siempre les saludaba cuando volvían a casa. Mientras les abría el portal, les decía: “Buenas noches y gracias”. ¿Por qué les daba las gracias? Los vecinos siempre sacaban de su bolsillo una moneda de cinco pesetas y se la daban al sereno. Los serenos no gozaron nunca de garantía social ni contrato de trabajo. Vivían fundamentalmente de las propinas de los vecinos de su manzana.

Antiguamente el sereno hacía más que vigilar la calle y abrir los portales. Uno de sus cometidos consistía en cantar las horas a intervalos de quince minutos. Después de dar las horas él añadía el estado del tiempo: “¡Las doce y cuarto y sereno!” o “¡Las tres y media y lloviendo!” Algunos serenos especialmente comunicativos hacían referencia al fulgor de las estrellas o cualquier otra circunstancia que les pareciera apropiada. A veces, también eran los primeros en detectar un incendio y alertar al cuerpo de bomberos.

Hoy en día no hay más serenos. La gente tiene que llevar las llaves para abrir los portales de sus casas. Cuando había serenos los vecinos se quejaban un poco, porque creían que el sereno sabía demasiado de su vida. Hoy lamentan la desaparición de estos “ángeles nocturnos”. Dicen que sin su vigilancia hay más crímenes en las calles.

¿Quién era el sereno y qué hacía? Pues, el sereno siempre trabajaba de noche. A eso de las once de la noche se cerraban los portales de los edificios de las ciudades españolas y salía a trabajar el sereno con su chuzo (palo armado con un pincho de hierro). Él vigilaba por la calle durante la noche. Iba vestido con una bata gris y tocado con una gorra. También llevaba las llaves de los portales de todos los edificios de la calle o de la manzana que él tenía asignada. No podía salir de ésta, a menos que existieran circunstancias de especial urgencia y habiéndose asegurado de antemano un sustituto. Durante su horario laboral no debía mantener conversaciones ni sentarse y, por supuesto, tenía que mantenerse siempre en estado de alerta.

Cuando un vecino regresaba a casa después de las once de la noche, daba palmadas al llegar al portal de su casa. Al oír las palmadas, el sereno daba unos golpes con su chuzo. Cuando el vecino los oía, sabía que el sereno iba a llegar dentro de unos momentos. Y así era. Casi en seguida el sereno aparecía de la oscuridad con su chuzo y el gran llavero en la mano. Como el sereno conocía a todos los vecinos, siempre les saludaba cuando volvían a casa. Mientras les abría el portal, les decía: “Buenas noches y gracias”. ¿Por qué les daba las gracias? Los vecinos siempre sacaban de su bolsillo una moneda de cinco pesetas y se la daban al sereno. Los serenos no gozaron nunca de garantía social ni contrato de trabajo. Vivían fundamentalmente de las propinas de los vecinos de su manzana.

Antiguamente el sereno hacía más que vigilar la calle y abrir los portales. Uno de sus cometidos consistía en cantar las horas a intervalos de quince minutos. Después de dar las horas él añadía el estado del tiempo: “¡Las doce y cuarto y sereno!” o “¡Las tres y media y lloviendo!” Algunos serenos especialmente comunicativos hacían referencia al fulgor de las estrellas o cualquier otra circunstancia que les pareciera apropiada. A veces, también eran los primeros en detectar un incendio y alertar al cuerpo de bomberos.

Hoy en día no hay más serenos. La gente tiene que llevar las llaves para abrir los portales de sus casas. Cuando había serenos los vecinos se quejaban un poco, porque creían que el sereno sabía demasiado de su vida. Hoy lamentan la desaparición de estos “ángeles nocturnos”. Dicen que sin su vigilancia hay más crímenes en las calles.

¿Quién era el sereno y qué hacía? Pues, el sereno siempre trabajaba de noche. A eso de las once de la noche se cerraban los portales de los edificios de las ciudades españolas y salía a trabajar el sereno con su chuzo (palo armado con un pincho de hierro). Él vigilaba por la calle durante la noche. Iba vestido con una bata gris y tocado con una gorra. También llevaba las llaves de los portales de todos los edificios de la calle o de la manzana que él tenía asignada. No podía salir de ésta, a menos que existieran circunstancias de especial urgencia y habiéndose asegurado de antemano un sustituto. Durante su horario laboral no debía mantener conversaciones ni sentarse y, por supuesto, tenía que mantenerse siempre en estado de alerta.

Cuando un vecino regresaba a casa después de las once de la noche, daba palmadas al llegar al portal de su casa. Al oír las palmadas, el sereno daba unos golpes con su chuzo. Cuando el vecino los oía, sabía que el sereno iba a llegar dentro de unos momentos. Y así era. Casi en seguida el sereno aparecía de la oscuridad con su chuzo y el gran llavero en la mano. Como el sereno conocía a todos los vecinos, siempre les saludaba cuando volvían a casa. Mientras les abría el portal, les decía: “Buenas noches y gracias”. ¿Por qué les daba las gracias? Los vecinos siempre sacaban de su bolsillo una moneda de cinco pesetas y se la daban al sereno. Los serenos no gozaron nunca de garantía social ni contrato de trabajo. Vivían fundamentalmente de las propinas de los vecinos de su manzana.

Antiguamente el sereno hacía más que vigilar la calle y abrir los portales. Uno de sus cometidos consistía en cantar las horas a intervalos de quince minutos. Después de dar las horas él añadía el estado del tiempo: “¡Las doce y cuarto y sereno!” o “¡Las tres y media y lloviendo!” Algunos serenos especialmente comunicativos hacían referencia al fulgor de las estrellas o cualquier otra circunstancia que les pareciera apropiada. A veces, también eran los primeros en detectar un incendio y alertar al cuerpo de bomberos.

Hoy en día no hay más serenos. La gente tiene que llevar las llaves para abrir los portales de sus casas. Cuando había serenos los vecinos se quejaban un poco, porque creían que el sereno sabía demasiado de su vida. Hoy lamentan la desaparición de estos “ángeles nocturnos”. Dicen que sin su vigilancia hay más crímenes en las calles.

¿Quién era el sereno y qué hacía? Pues, el sereno siempre trabajaba de noche. A eso de las once de la noche se cerraban los portales de los edificios de las ciudades españolas y salía a trabajar el sereno con su chuzo (palo armado con un pincho de hierro). Él vigilaba por la calle durante la noche. Iba vestido con una bata gris y tocado con una gorra. También llevaba las llaves de los portales de todos los edificios de la calle o de la manzana que él tenía asignada. No podía salir de ésta, a menos que existieran circunstancias de especial urgencia y habiéndose asegurado de antemano un sustituto. Durante su horario laboral no debía mantener conversaciones ni sentarse y, por supuesto, tenía que mantenerse siempre en estado de alerta.

Cuando un vecino regresaba a casa después de las once de la noche, daba palmadas al llegar al portal de su casa. Al oír las palmadas, el sereno daba unos golpes con su chuzo. Cuando el vecino los oía, sabía que el sereno iba a llegar dentro de unos momentos. Y así era. Casi en seguida el sereno aparecía de la oscuridad con su chuzo y el gran llavero en la mano. Como el sereno conocía a todos los vecinos, siempre les saludaba cuando volvían a casa. Mientras les abría el portal, les decía: “Buenas noches y gracias”. ¿Por qué les daba las gracias? Los vecinos siempre sacaban de su bolsillo una moneda de cinco pesetas y se la daban al sereno. Los serenos no gozaron nunca de garantía social ni contrato de trabajo. Vivían fundamentalmente de las propinas de los vecinos de su manzana.

Antiguamente el sereno hacía más que vigilar la calle y abrir los portales. Uno de sus cometidos consistía en cantar las horas a intervalos de quince minutos. Después de dar las horas él añadía el estado del tiempo: “¡Las doce y cuarto y sereno!” o “¡Las tres y media y lloviendo!” Algunos serenos especialmente comunicativos hacían referencia al fulgor de las estrellas o cualquier otra circunstancia que les pareciera apropiada. A veces, también eran los primeros en detectar un incendio y alertar al cuerpo de bomberos.

Hoy en día no hay más serenos. La gente tiene que llevar las llaves para abrir los portales de sus casas. Cuando había serenos los vecinos se quejaban un poco, porque creían que el sereno sabía demasiado de su vida. Hoy lamentan la desaparición de estos “ángeles nocturnos”. Dicen que sin su vigilancia hay más crímenes en las calles.

¿Quién era el sereno y qué hacía? Pues, el sereno siempre trabajaba de noche. A eso de las once de la noche se cerraban los portales de los edificios de las ciudades españolas y salía a trabajar el sereno con su chuzo (palo armado con un pincho de hierro). Él vigilaba por la calle durante la noche. Iba vestido con una bata gris y tocado con una gorra. También llevaba las llaves de los portales de todos los edificios de la calle o de la manzana que él tenía asignada. No podía salir de ésta, a menos que existieran circunstancias de especial urgencia y habiéndose asegurado de antemano un sustituto. Durante su horario laboral no debía mantener conversaciones ni sentarse y, por supuesto, tenía que mantenerse siempre en estado de alerta.

Cuando un vecino regresaba a casa después de las once de la noche, daba palmadas al llegar al portal de su casa. Al oír las palmadas, el sereno daba unos golpes con su chuzo. Cuando el vecino los oía, sabía que el sereno iba a llegar dentro de unos momentos. Y así era. Casi en seguida el sereno aparecía de la oscuridad con su chuzo y el gran llavero en la mano. Como el sereno conocía a todos los vecinos, siempre les saludaba cuando volvían a casa. Mientras les abría el portal, les decía: “Buenas noches y gracias”. ¿Por qué les daba las gracias? Los vecinos siempre sacaban de su bolsillo una moneda de cinco pesetas y se la daban al sereno. Los serenos no gozaron nunca de garantía social ni contrato de trabajo. Vivían fundamentalmente de las propinas de los vecinos de su manzana.

Antiguamente el sereno hacía más que vigilar la calle y abrir los portales. Uno de sus cometidos consistía en cantar las horas a intervalos de quince minutos. Después de dar las horas él añadía el estado del tiempo: “¡Las doce y cuarto y sereno!” o “¡Las tres y media y lloviendo!” Algunos serenos especialmente comunicativos hacían referencia al fulgor de las estrellas o cualquier otra circunstancia que les pareciera apropiada. A veces, también eran los primeros en detectar un incendio y alertar al cuerpo de bomberos.

Hoy en día no hay más serenos. La gente tiene que llevar las llaves para abrir los portales de sus casas. Cuando había serenos los vecinos se quejaban un poco, porque creían que el sereno sabía demasiado de su vida. Hoy lamentan la desaparición de estos “ángeles nocturnos”. Dicen que sin su vigilancia hay más crímenes en las calles.

(1) Había una vez una hormiga que se levantaba muy temprano todas las mañanas para ir a buscar grano al campo. (2) Siempre hacía el mismo camino y siempre se encontraba a su vecina la cigarra subida a un árbol y cantando sin parar. (3) Mientras la hormiga (ESFORZARSE) ________ por llevar a su casa todas las provisiones que podía, la cigarra se pasaba el día disfrutando del sol del verano.

(4) ‒ ¡ (HACER) ________ reservas para el invierno! ‒ le gritaba la hormiga.

(5) ‒ Yo no he nacido para trabajar — contestaba la cigarra.

(6) ‒ Si tú me (AYUDAR) ________, después te recompensaré, ‒ insistía la hormiga que se apresuraba a recoger los últimos granos de trigo con la llegada de los primeros fríos.

(7) ‒ Yo soy artista. (8) ¿No oyes cómo canto? ‒ repetía la cigarra. (9) ‒ En invierno tú (ARREPENTIRSE) ________ ‒ exclamó por fin la hormiga, - no tendrás con qué alimentarte.

(10) Pero la cigarra seguía (CANTAR) ________.

(11) Cuando los campos se cubrieron de nieve, la hormiga dio por finalizada su tarea y se preparó para pasar el crudo invierno. (12) Entonces llamó a su puerta la cigarra y le (PEDIR) ________ comida y refugio.

(13) ‒ Tengo hambre y frío ‒ le dijo apenada.

(14) ‒ ¿Ahora vienes a pedirme comida? ‒ respondió la hormiga.(15) ‒ Mientras yo no paraba de buscar grano tú te has pasado todo el verano disfrutando del sol. (16) Y le cerró la puerta. (17) La cigarra comprendió que no (PODER) ________ estar siempre descansando.

(1) Había una vez una hormiga que se levantaba muy temprano todas las mañanas para ir a buscar grano al campo. (2) Siempre hacía el mismo camino y siempre se encontraba a su vecina la cigarra subida a un árbol y cantando sin parar. (3) Mientras la hormiga (ESFORZARSE) ________ por llevar a su casa todas las provisiones que podía, la cigarra se pasaba el día disfrutando del sol del verano.

(4) ‒ ¡ (HACER) ________ reservas para el invierno! ‒ le gritaba la hormiga.

(5) ‒ Yo no he nacido para trabajar — contestaba la cigarra.

(6) ‒ Si tú me (AYUDAR) ________, después te recompensaré, ‒ insistía la hormiga que se apresuraba a recoger los últimos granos de trigo con la llegada de los primeros fríos.

(7) ‒ Yo soy artista. (8) ¿No oyes cómo canto? ‒ repetía la cigarra. (9) ‒ En invierno tú (ARREPENTIRSE) ________ ‒ exclamó por fin la hormiga, - no tendrás con qué alimentarte.

(10) Pero la cigarra seguía (CANTAR) ________.

(11) Cuando los campos se cubrieron de nieve, la hormiga dio por finalizada su tarea y se preparó para pasar el crudo invierno. (12) Entonces llamó a su puerta la cigarra y le (PEDIR) ________ comida y refugio.

(13) ‒ Tengo hambre y frío ‒ le dijo apenada.

(14) ‒ ¿Ahora vienes a pedirme comida? ‒ respondió la hormiga.(15) ‒ Mientras yo no paraba de buscar grano tú te has pasado todo el verano disfrutando del sol. (16) Y le cerró la puerta. (17) La cigarra comprendió que no (PODER) ________ estar siempre descansando.

(1)Había una vez una hormiga que se levantaba muy temprano todas las mañanas para ir a buscar grano al campo. (2)Siempre hacía el mismo camino y siempre se encontraba a su vecina la cigarra subida a un árbol y cantando sin parar. (3)Mientras la hormiga (ESFORZARSE)________ por llevar a su casa todas las provisiones que podía, la cigarra se pasaba el día disfrutando del sol del verano.

(4)‒ ¡ (HACER)________ reservas para el invierno! ‒ le gritaba la hormiga.

(5)‒ Yo no he nacido para trabajar — contestaba la cigarra.

(6)‒ Si tú me (AYUDAR)________, después te recompensaré, ‒ insistía la hormiga que se apresuraba a recoger los últimos granos de trigo con la llegada de los primeros fríos.

(7)‒ Yo soy artista. (8)¿No oyes cómo canto? ‒ repetía la cigarra. (9)‒ En invierno tú (ARREPENTIRSE)________ ‒ exclamó por fin la hormiga, - no tendrás con qué alimentarte.

(10)Pero la cigarra seguía (CANTAR)________.

(11)Cuando los campos se cubrieron de nieve, la hormiga dio por finalizada su tarea y se preparó para pasar el crudo invierno. (12)Entonces llamó a su puerta la cigarra y le (PEDIR)________ comida y refugio.

(13)‒ Tengo hambre y frío ‒ le dijo apenada.

(14)‒ ¿Ahora vienes a pedirme comida? ‒ respondió la hormiga. ‒ (15)Mientras yo no paraba de buscar grano tú te has pasado todo el verano disfrutando del sol. (16)Y le cerró la puerta. (17)La cigarra comprendió que no (PODER)________ estar siempre descansando.

(1) Había una vez una hormiga que se levantaba muy temprano todas las mañanas para ir a buscar grano al campo. (2) Siempre hacía el mismo camino y siempre se encontraba a su vecina la cigarra subida a un árbol y cantando sin parar. (3) Mientras la hormiga (ESFORZARSE) ________ por llevar a su casa todas las provisiones que podía, la cigarra se pasaba el día disfrutando del sol del verano.

(4) ‒ ¡ (HACER) ________ reservas para el invierno! ‒ le gritaba la hormiga.

(5) ‒ Yo no he nacido para trabajar — contestaba la cigarra.

(6) ‒ Si tú me (AYUDAR) ________, después te recompensaré, ‒ insistía la hormiga que se apresuraba a recoger los últimos granos de trigo con la llegada de los primeros fríos.

(7) ‒ Yo soy artista. (8) ¿No oyes cómo canto? ‒ repetía la cigarra. (9) ‒ En invierno tú (ARREPENTIRSE) ________ ‒ exclamó por fin la hormiga, - no tendrás con qué alimentarte.

(10) Pero la cigarra seguía (CANTAR) ________.

(11) Cuando los campos se cubrieron de nieve, la hormiga dio por finalizada su tarea y se preparó para pasar el crudo invierno. (12) Entonces llamó a su puerta la cigarra y le (PEDIR) ________ comida y refugio.

(13) ‒ Tengo hambre y frío ‒ le dijo apenada.

(14) ‒ ¿Ahora vienes a pedirme comida? ‒ respondió la hormiga.(15) ‒ Mientras yo no paraba de buscar grano tú te has pasado todo el verano disfrutando del sol. (16) Y le cerró la puerta. (17) La cigarra comprendió que no (PODER) ________ estar siempre descansando.

(1) Había una vez una hormiga que se levantaba muy temprano todas las mañanas para ir a buscar grano al campo. (2) Siempre hacía el mismo camino y siempre se encontraba a su vecina la cigarra subida a un árbol y cantando sin parar. (3) Mientras la hormiga (ESFORZARSE) ________ por llevar a su casa todas las provisiones que podía, la cigarra se pasaba el día disfrutando del sol del verano.

(4) ‒ ¡ (HACER) ________ reservas para el invierno! ‒ le gritaba la hormiga.

(5) ‒ Yo no he nacido para trabajar — contestaba la cigarra.

(6) ‒ Si tú me (AYUDAR) ________, después te recompensaré, ‒ insistía la hormiga que se apresuraba a recoger los últimos granos de trigo con la llegada de los primeros fríos.

(7) ‒ Yo soy artista. (8) ¿No oyes cómo canto? ‒ repetía la cigarra. (9) ‒ En invierno tú (ARREPENTIRSE) ________ ‒ exclamó por fin la hormiga, - no tendrás con qué alimentarte.

(10) Pero la cigarra seguía (CANTAR) ________.

(11) Cuando los campos se cubrieron de nieve, la hormiga dio por finalizada su tarea y se preparó para pasar el crudo invierno. (12) Entonces llamó a su puerta la cigarra y le (PEDIR) ________ comida y refugio.

(13) ‒ Tengo hambre y frío ‒ le dijo apenada.

(14) ‒ ¿Ahora vienes a pedirme comida? ‒ respondió la hormiga.(15) ‒ Mientras yo no paraba de buscar grano tú te has pasado todo el verano disfrutando del sol. (16) Y le cerró la puerta. (17) La cigarra comprendió que no (PODER) ________ estar siempre descansando.

(1) Había una vez una hormiga que se levantaba muy temprano todas las mañanas para ir a buscar grano al campo. (2) Siempre hacía el mismo camino y siempre se encontraba a su vecina la cigarra subida a un árbol y cantando sin parar. (3) Mientras la hormiga (ESFORZARSE) ________ por llevar a su casa todas las provisiones que podía, la cigarra se pasaba el día disfrutando del sol del verano.

(4) ‒ ¡ (HACER) ________ reservas para el invierno! ‒ le gritaba la hormiga.

(5) ‒ Yo no he nacido para trabajar — contestaba la cigarra.

(6) ‒ Si tú me (AYUDAR) ________, después te recompensaré, ‒ insistía la hormiga que se apresuraba a recoger los últimos granos de trigo con la llegada de los primeros fríos.

(7) ‒ Yo soy artista. (8) ¿No oyes cómo canto? ‒ repetía la cigarra. (9) ‒ En invierno tú (ARREPENTIRSE) ________ ‒ exclamó por fin la hormiga, - no tendrás con qué alimentarte.

(10) Pero la cigarra seguía (CANTAR) ________.

(11) Cuando los campos se cubrieron de nieve, la hormiga dio por finalizada su tarea y se preparó para pasar el crudo invierno. (12) Entonces llamó a su puerta la cigarra y le (PEDIR) ________ comida y refugio.

(13) ‒ Tengo hambre y frío ‒ le dijo apenada.

(14) ‒ ¿Ahora vienes a pedirme comida? ‒ respondió la hormiga.(15) ‒ Mientras yo no paraba de buscar grano tú te has pasado todo el verano disfrutando del sol. (16) Y le cerró la puerta. (17) La cigarra comprendió que no (PODER) ________ estar siempre descansando.

(1) Había una vez una hormiga que se levantaba muy temprano todas las mañanas para ir a buscar grano al campo. (2) Siempre hacía el mismo camino y siempre se encontraba a su vecina la cigarra subida a un árbol y cantando sin parar. (3) Mientras la hormiga (ESFORZARSE) ________ por llevar a su casa todas las provisiones que podía, la cigarra se pasaba el día disfrutando del sol del verano.

(4) ‒ ¡ (HACER) ________ reservas para el invierno! ‒ le gritaba la hormiga.

(5) ‒ Yo no he nacido para trabajar — contestaba la cigarra.

(6) ‒ Si tú me (AYUDAR) ________, después te recompensaré, ‒ insistía la hormiga que se apresuraba a recoger los últimos granos de trigo con la llegada de los primeros fríos.

(7) ‒ Yo soy artista. (8) ¿No oyes cómo canto? ‒ repetía la cigarra. (9) ‒ En invierno tú (ARREPENTIRSE) ________ ‒ exclamó por fin la hormiga, - no tendrás con qué alimentarte.

(10) Pero la cigarra seguía (CANTAR) ________.

(11) Cuando los campos se cubrieron de nieve, la hormiga dio por finalizada su tarea y se preparó para pasar el crudo invierno. (12) Entonces llamó a su puerta la cigarra y le (PEDIR) ________ comida y refugio.

(13) ‒ Tengo hambre y frío ‒ le dijo apenada.

(14) ‒ ¿Ahora vienes a pedirme comida? ‒ respondió la hormiga.(15) ‒ Mientras yo no paraba de buscar grano tú te has pasado todo el verano disfrutando del sol. (16) Y le cerró la puerta. (17) La cigarra comprendió que no (PODER) ________ estar siempre descansando.

(1) ¿CÓMO TRATAR A OTRA PERSONA? (2) ¿CUÁNDO HACERLO?

(3) Cuando nos presentan a una persona, o charlamos con otras personas, surge el "inconveniente" de como tratar a la misma. (4) Diremos que siempre, y por defecto, el (TRATAR) ________ debe ser de usted.

(5) No se puede utilizar el tú de forma directa, aunque siempre utilicemos alguna excusa para (JUSTO) ________ esta fórmula (es más joven que nosotros, es un empleado de un establecimiento, etc.).

(6) No es un comportamiento educado tutear "de forma directa" a una persona que no conocemos. (7) Lo mejor es utilizar siempre la fórmula de "usted" hasta que el propio interesado nos indique lo (CONTRA) ________. (8) Y si no lo hace, debemos seguir utilizando el usted siempre. (9) Hay que diferenciar a los jóvenes de las personas mayores. (10) Entre los jóvenes está más admitido el tuteo, pero debemos esperar a que nos lo digan. (11) Entre los mayores será fácil que no digan nada acerca del tuteo y prefieran que se les trate de usted.

(12) Tutear no significa ser más moderno o ser más (ABRIR) ________, sino una considerable falta de educación e incluso de respeto, por otra persona. (13) Se debe tratar de usted lo mismo a una mujer que a un hombre. (14) Ahora bien, si en otras ocasiones ya hemos obtenido el permiso de esa persona para poderla tutear, entonces podremos aplicar esta forma.

(15) Por lo tanto, como hemos explicado (ANTERIOR) ________, evite el tuteo tanto en sus relaciones laborales como sociales.

(16) Existen algunas ocasiones, en que se asimila el tuteo sin una proposición previa cuando nos presentan a una persona de nuestra misma edad y similar categoría. (17) Una (PRESENTAR) ________ entre amigos, compañeros de trabajo, etc. (18) Pero recordemos, que lo más prudente es, siempre, empezar por usted.

(1) ¿CÓMO TRATAR A OTRA PERSONA? (2) ¿CUÁNDO HACERLO?

(3) Cuando nos presentan a una persona, o charlamos con otras personas, surge el "inconveniente" de como tratar a la misma. (4) Diremos que siempre, y por defecto, el (TRATAR) ________ debe ser de usted.

(5) No se puede utilizar el tú de forma directa, aunque siempre utilicemos alguna excusa para (JUSTO) ________ esta fórmula (es más joven que nosotros, es un empleado de un establecimiento, etc.).

(6) No es un comportamiento educado tutear "de forma directa" a una persona que no conocemos. (7) Lo mejor es utilizar siempre la fórmula de "usted" hasta que el propio interesado nos indique lo (CONTRA) ________. (8) Y si no lo hace, debemos seguir utilizando el usted siempre. (9) Hay que diferenciar a los jóvenes de las personas mayores. (10) Entre los jóvenes está más admitido el tuteo, pero debemos esperar a que nos lo digan. (11) Entre los mayores será fácil que no digan nada acerca del tuteo y prefieran que se les trate de usted.

(12) Tutear no significa ser más moderno o ser más (ABRIR) ________, sino una considerable falta de educación e incluso de respeto, por otra persona. (13) Se debe tratar de usted lo mismo a una mujer que a un hombre. (14) Ahora bien, si en otras ocasiones ya hemos obtenido el permiso de esa persona para poderla tutear, entonces podremos aplicar esta forma.

(15) Por lo tanto, como hemos explicado (ANTERIOR) ________, evite el tuteo tanto en sus relaciones laborales como sociales.

(16) Existen algunas ocasiones, en que se asimila el tuteo sin una proposición previa cuando nos presentan a una persona de nuestra misma edad y similar categoría. (17) Una (PRESENTAR) ________ entre amigos, compañeros de trabajo, etc. (18) Pero recordemos, que lo más prudente es, siempre, empezar por usted.

(1) ¿CÓMO TRATAR A OTRA PERSONA? (2) ¿CUÁNDO HACERLO?

(3) Cuando nos presentan a una persona, o charlamos con otras personas, surge el "inconveniente" de como tratar a la misma. (4) Diremos que siempre, y por defecto, el (TRATAR) ________ debe ser de usted.

(5) No se puede utilizar el tú de forma directa, aunque siempre utilicemos alguna excusa para (JUSTO) ________ esta fórmula (es más joven que nosotros, es un empleado de un establecimiento, etc.).

(6) No es un comportamiento educado tutear "de forma directa" a una persona que no conocemos. (7) Lo mejor es utilizar siempre la fórmula de "usted" hasta que el propio interesado nos indique lo (CONTRA) ________. (8) Y si no lo hace, debemos seguir utilizando el usted siempre. (9) Hay que diferenciar a los jóvenes de las personas mayores. (10) Entre los jóvenes está más admitido el tuteo, pero debemos esperar a que nos lo digan. (11) Entre los mayores será fácil que no digan nada acerca del tuteo y prefieran que se les trate de usted.

(12) Tutear no significa ser más moderno o ser más (ABRIR) ________, sino una considerable falta de educación e incluso de respeto, por otra persona. (13) Se debe tratar de usted lo mismo a una mujer que a un hombre. (14) Ahora bien, si en otras ocasiones ya hemos obtenido el permiso de esa persona para poderla tutear, entonces podremos aplicar esta forma.

(15) Por lo tanto, como hemos explicado (ANTERIOR) ________, evite el tuteo tanto en sus relaciones laborales como sociales.

(16) Existen algunas ocasiones, en que se asimila el tuteo sin una proposición previa cuando nos presentan a una persona de nuestra misma edad y similar categoría. (17) Una (PRESENTAR) ________ entre amigos, compañeros de trabajo, etc. (18) Pero recordemos, que lo más prudente es, siempre, empezar por usted.

(1) ¿CÓMO TRATAR A OTRA PERSONA? (2) ¿CUÁNDO HACERLO?

(3) Cuando nos presentan a una persona, o charlamos con otras personas, surge el "inconveniente" de como tratar a la misma. (4) Diremos que siempre, y por defecto, el (TRATAR) ________ debe ser de usted.

(5) No se puede utilizar el tú de forma directa, aunque siempre utilicemos alguna excusa para (JUSTO) ________ esta fórmula (es más joven que nosotros, es un empleado de un establecimiento, etc.).

(6) No es un comportamiento educado tutear "de forma directa" a una persona que no conocemos. (7) Lo mejor es utilizar siempre la fórmula de "usted" hasta que el propio interesado nos indique lo (CONTRA) ________. (8) Y si no lo hace, debemos seguir utilizando el usted siempre. (9) Hay que diferenciar a los jóvenes de las personas mayores. (10) Entre los jóvenes está más admitido el tuteo, pero debemos esperar a que nos lo digan. (11) Entre los mayores será fácil que no digan nada acerca del tuteo y prefieran que se les trate de usted.

(12) Tutear no significa ser más moderno o ser más (ABRIR) ________, sino una considerable falta de educación e incluso de respeto, por otra persona. (13) Se debe tratar de usted lo mismo a una mujer que a un hombre. (14) Ahora bien, si en otras ocasiones ya hemos obtenido el permiso de esa persona para poderla tutear, entonces podremos aplicar esta forma.

(15) Por lo tanto, como hemos explicado (ANTERIOR) ________, evite el tuteo tanto en sus relaciones laborales como sociales.

(16) Existen algunas ocasiones, en que se asimila el tuteo sin una proposición previa cuando nos presentan a una persona de nuestra misma edad y similar categoría. (17) Una (PRESENTAR) ________ entre amigos, compañeros de trabajo, etc. (18) Pero recordemos, que lo más prudente es, siempre, empezar por usted.

(1) ¿CÓMO TRATAR A OTRA PERSONA? (2) ¿CUÁNDO HACERLO?

(3) Cuando nos presentan a una persona, o charlamos con otras personas, surge el "inconveniente" de como tratar a la misma. (4) Diremos que siempre, y por defecto, el (TRATAR) ________ debe ser de usted.

(5) No se puede utilizar el tú de forma directa, aunque siempre utilicemos alguna excusa para (JUSTO) ________ esta fórmula (es más joven que nosotros, es un empleado de un establecimiento, etc.).

(6) No es un comportamiento educado tutear "de forma directa" a una persona que no conocemos. (7) Lo mejor es utilizar siempre la fórmula de "usted" hasta que el propio interesado nos indique lo (CONTRA) ________. (8) Y si no lo hace, debemos seguir utilizando el usted siempre. (9) Hay que diferenciar a los jóvenes de las personas mayores. (10) Entre los jóvenes está más admitido el tuteo, pero debemos esperar a que nos lo digan. (11) Entre los mayores será fácil que no digan nada acerca del tuteo y prefieran que se les trate de usted.

(12) Tutear no significa ser más moderno o ser más (ABRIR) ________, sino una considerable falta de educación e incluso de respeto, por otra persona. (13) Se debe tratar de usted lo mismo a una mujer que a un hombre. (14) Ahora bien, si en otras ocasiones ya hemos obtenido el permiso de esa persona para poderla tutear, entonces podremos aplicar esta forma.

(15) Por lo tanto, como hemos explicado (ANTERIOR) ________, evite el tuteo tanto en sus relaciones laborales como sociales.

(16) Existen algunas ocasiones, en que se asimila el tuteo sin una proposición previa cuando nos presentan a una persona de nuestra misma edad y similar categoría. (17) Una (PRESENTAR) ________ entre amigos, compañeros de trabajo, etc. (18) Pero recordemos, que lo más prudente es, siempre, empezar por usted.

(1) ¿CÓMO TRATAR A OTRA PERSONA? (2) ¿CUÁNDO HACERLO?

(3) Cuando nos presentan a una persona, o charlamos con otras personas, surge el "inconveniente" de como tratar a la misma. (4) Diremos que siempre, y por defecto, el (TRATAR) ________ debe ser de usted.

(5) No se puede utilizar el tú de forma directa, aunque siempre utilicemos alguna excusa para (JUSTO) ________ esta fórmula (es más joven que nosotros, es un empleado de un establecimiento, etc.).

(6) No es un comportamiento educado tutear "de forma directa" a una persona que no conocemos. (7) Lo mejor es utilizar siempre la fórmula de "usted" hasta que el propio interesado nos indique lo (CONTRA) ________. (8) Y si no lo hace, debemos seguir utilizando el usted siempre. (9) Hay que diferenciar a los jóvenes de las personas mayores. (10) Entre los jóvenes está más admitido el tuteo, pero debemos esperar a que nos lo digan. (11) Entre los mayores será fácil que no digan nada acerca del tuteo y prefieran que se les trate de usted.

(12) Tutear no significa ser más moderno o ser más (ABRIR) ________, sino una considerable falta de educación e incluso de respeto, por otra persona. (13) Se debe tratar de usted lo mismo a una mujer que a un hombre. (14) Ahora bien, si en otras ocasiones ya hemos obtenido el permiso de esa persona para poderla tutear, entonces podremos aplicar esta forma.

(15) Por lo tanto, como hemos explicado (ANTERIOR) ________, evite el tuteo tanto en sus relaciones laborales como sociales.

(16) Existen algunas ocasiones, en que se asimila el tuteo sin una proposición previa cuando nos presentan a una persona de nuestra misma edad y similar categoría. (17) Una (PRESENTAR) ________ entre amigos, compañeros de trabajo, etc. (18) Pero recordemos, que lo más prudente es, siempre, empezar por usted.

Yo llegué a España en 2005. En aquella época en mi país la situación económica era muy mala: España era para nosotros una puerta a Europa y a una nueva vida llena de posibilidades de futuro. Aunque me (A) ________ afortunado porque tenía mujer y dos hijas, queríamos un futuro mejor para los cuatro. Por lo tanto decidimos emigrar a España donde nunca habíamos estado ni teníamos (B) ________ familiares.

Primeramente, solicité trabajo en la hostelería; luego, siguiendo el consejo de un amigo, en la construcción. Después de acudir a muchas obras, me ofrecieron un contrato temporal que al (C) ________ de un tiempo se convirtió en fijo. Al (D) ________ me había trasladado a España yo solo, pero después de seis meses las pude traer a mi esposa e hijas. Nos integramos en la vida española muy rápido y nos beneficiamos de sus (E) ________: tenemos seguridad social, mis hijas estudian en un colegio público, hemos comprado un piso.

Desde hace tres años, con la crisis económica la construcción está en crisis y ahora estoy en (F) ________. Pensábamos acogernos al programa de retorno voluntario que propuso el Gobierno, pero nos decidimos quedar. Aunque he llamado a muchas puertas, no consigo encontrar trabajo pero, al menos, (G) ________ el subsidio de desempleo.

Yo llegué a España en 2005. En aquella época en mi país la situación económica era muy mala: España era para nosotros una puerta a Europa y a una nueva vida llena de posibilidades de futuro. Aunque me (A) ________ afortunado porque tenía mujer y dos hijas, queríamos un futuro mejor para los cuatro. Por lo tanto decidimos emigrar a España donde nunca habíamos estado ni teníamos (B) ________ familiares.

Primeramente, solicité trabajo en la hostelería; luego, siguiendo el consejo de un amigo, en la construcción. Después de acudir a muchas obras, me ofrecieron un contrato temporal que al (C) ________ de un tiempo se convirtió en fijo. Al (D) ________ me había trasladado a España yo solo, pero después de seis meses las pude traer a mi esposa e hijas. Nos integramos en la vida española muy rápido y nos beneficiamos de sus (E) ________: tenemos seguridad social, mis hijas estudian en un colegio público, hemos comprado un piso.

Desde hace tres años, con la crisis económica la construcción está en crisis y ahora estoy en (F) ________. Pensábamos acogernos al programa de retorno voluntario que propuso el Gobierno, pero nos decidimos quedar. Aunque he llamado a muchas puertas, no consigo encontrar trabajo pero, al menos, (G) ________ el subsidio de desempleo.

Yo llegué a España en 2005. En aquella época en mi país la situación económica era muy mala: España era para nosotros una puerta a Europa y a una nueva vida llena de posibilidades de futuro. Aunque me (A) ________ afortunado porque tenía mujer y dos hijas, queríamos un futuro mejor para los cuatro. Por lo tanto decidimos emigrar a España donde nunca habíamos estado ni teníamos (B) ________ familiares.

Primeramente, solicité trabajo en la hostelería; luego, siguiendo el consejo de un amigo, en la construcción. Después de acudir a muchas obras, me ofrecieron un contrato temporal que al (C) ________ de un tiempo se convirtió en fijo. Al (D) ________ me había trasladado a España yo solo, pero después de seis meses las pude traer a mi esposa e hijas. Nos integramos en la vida española muy rápido y nos beneficiamos de sus (E) ________: tenemos seguridad social, mis hijas estudian en un colegio público, hemos comprado un piso.

Desde hace tres años, con la crisis económica la construcción está en crisis y ahora estoy en (F) ________. Pensábamos acogernos al programa de retorno voluntario que propuso el Gobierno, pero nos decidimos quedar. Aunque he llamado a muchas puertas, no consigo encontrar trabajo pero, al menos, (G) ________ el subsidio de desempleo.

Yo llegué a España en 2005. En aquella época en mi país la situación económica era muy mala: España era para nosotros una puerta a Europa y a una nueva vida llena de posibilidades de futuro. Aunque me (A) ________ afortunado porque tenía mujer y dos hijas, queríamos un futuro mejor para los cuatro. Por lo tanto decidimos emigrar a España donde nunca habíamos estado ni teníamos (B) ________ familiares.

Primeramente, solicité trabajo en la hostelería; luego, siguiendo el consejo de un amigo, en la construcción. Después de acudir a muchas obras, me ofrecieron un contrato temporal que al (C) ________ de un tiempo se convirtió en fijo. Al (D) ________ me había trasladado a España yo solo, pero después de seis meses las pude traer a mi esposa e hijas. Nos integramos en la vida española muy rápido y nos beneficiamos de sus (E) ________: tenemos seguridad social, mis hijas estudian en un colegio público, hemos comprado un piso.

Desde hace tres años, con la crisis económica la construcción está en crisis y ahora estoy en (F) ________. Pensábamos acogernos al programa de retorno voluntario que propuso el Gobierno, pero nos decidimos quedar. Aunque he llamado a muchas puertas, no consigo encontrar trabajo pero, al menos, (G) ________ el subsidio de desempleo.

Yo llegué a España en 2005. En aquella época en mi país la situación económica era muy mala: España era para nosotros una puerta a Europa y a una nueva vida llena de posibilidades de futuro. Aunque me (A) ________ afortunado porque tenía mujer y dos hijas, queríamos un futuro mejor para los cuatro. Por lo tanto decidimos emigrar a España donde nunca habíamos estado ni teníamos (B) ________ familiares.

Primeramente, solicité trabajo en la hostelería; luego, siguiendo el consejo de un amigo, en la construcción. Después de acudir a muchas obras, me ofrecieron un contrato temporal que al (C) ________ de un tiempo se convirtió en fijo. Al (D) ________ me había trasladado a España yo solo, pero después de seis meses las pude traer a mi esposa e hijas. Nos integramos en la vida española muy rápido y nos beneficiamos de sus (E) ________: tenemos seguridad social, mis hijas estudian en un colegio público, hemos comprado un piso.

Desde hace tres años, con la crisis económica la construcción está en crisis y ahora estoy en (F) ________. Pensábamos acogernos al programa de retorno voluntario que propuso el Gobierno, pero nos decidimos quedar. Aunque he llamado a muchas puertas, no consigo encontrar trabajo pero, al menos, (G) ________ el subsidio de desempleo.

Yo llegué a España en 2005. En aquella época en mi país la situación económica era muy mala: España era para nosotros una puerta a Europa y a una nueva vida llena de posibilidades de futuro. Aunque me (A) ________ afortunado porque tenía mujer y dos hijas, queríamos un futuro mejor para los cuatro. Por lo tanto decidimos emigrar a España donde nunca habíamos estado ni teníamos (B) ________ familiares.

Primeramente, solicité trabajo en la hostelería; luego, siguiendo el consejo de un amigo, en la construcción. Después de acudir a muchas obras, me ofrecieron un contrato temporal que al (C) ________ de un tiempo se convirtió en fijo. Al (D) ________ me había trasladado a España yo solo, pero después de seis meses las pude traer a mi esposa e hijas. Nos integramos en la vida española muy rápido y nos beneficiamos de sus (E) ________: tenemos seguridad social, mis hijas estudian en un colegio público, hemos comprado un piso.

Desde hace tres años, con la crisis económica la construcción está en crisis y ahora estoy en (F) ________. Pensábamos acogernos al programa de retorno voluntario que propuso el Gobierno, pero nos decidimos quedar. Aunque he llamado a muchas puertas, no consigo encontrar trabajo pero, al menos, (G) ________ el subsidio de desempleo.

Yo llegué a España en 2005. En aquella época en mi país la situación económica era muy mala: España era para nosotros una puerta a Europa y a una nueva vida llena de posibilidades de futuro. Aunque me (A) ________ afortunado porque tenía mujer y dos hijas, queríamos un futuro mejor para los cuatro. Por lo tanto decidimos emigrar a España donde nunca habíamos estado ni teníamos (B) ________ familiares.

Primeramente, solicité trabajo en la hostelería; luego, siguiendo el consejo de un amigo, en la construcción. Después de acudir a muchas obras, me ofrecieron un contrato temporal que al (C) ________ de un tiempo se convirtió en fijo. Al (D) ________ me había trasladado a España yo solo, pero después de seis meses las pude traer a mi esposa e hijas. Nos integramos en la vida española muy rápido y nos beneficiamos de sus (E) ________: tenemos seguridad social, mis hijas estudian en un colegio público, hemos comprado un piso.

Desde hace tres años, con la crisis económica la construcción está en crisis y ahora estoy en (F) ________. Pensábamos acogernos al programa de retorno voluntario que propuso el Gobierno, pero nos decidimos quedar. Aunque he llamado a muchas puertas, no consigo encontrar trabajo pero, al menos, (G) ________ el subsidio de desempleo.